Mejorar nuestra autoestima es imprescindible para recuperar el control de nuestra vida e ir en busca de nuestra felicidad.
La autoestima es el conjunto de creencias, percepciones, evaluaciones y pensamientos que tenemos acerca de nosotros mismos, la valoración que realizamos basándonos en nuestras experiencias y bajo la influencia de los demás.
¿Y esto qué significa? La autoestima evalúa lo mucho o poco que nos queremos. Lo que sentimos por nosotros mismos. Se compone del Autoconcepto, lo que pensamos de nosotros, por ejemplo, soy simpático, confiable, justo, honrado…. y la Autoimagen, la imagen que tenemos de nosotros, como nos vemos ante el espejo, altos, guapos, ojos bonitos, nariz grande…..
Si nuestra autoestima no es lo suficientemente fuerte pasarán a nuestro lado grandes oportunidades que dejaremos escapar simplemente por miedo al fracaso, por no creernos “capaces” o “válidos”. Oportunidades de trabajo, de conocer alguien interesante, de hacer un viaje fantástico….
Voy a darte algunos consejos para mejorar tu autoestima:
Autoconocimiento: Conócete a ti mismo, tus fortalezas, tus debilidades y descubrirás que esa autoimagen y ese autoconcepto que tienes de ti mismo no es real. La autoestima se forma en nosotros entre los 0 y los 7 años y se basa en lo que los mayores nos decían y nuestras experiencias personales. Ya es hora de que revisemos esa creencia y nos demos cuenta de que ya no somos aquella “personita” y rehagamos en nuestra mente una nueva “autoimagen” y un nuevo “autoconcepto” en base a nuestra realidad actual.
Sal de tu zona de confort: Salir de nuestra zona de confort, nos ayuda a conocernos mejor también. Además nos obliga a ponernos a prueba con nuevas experiencias, entrando en nuestra zona de aprendizaje y nuevos retos. Nos permite conocer gente diferente y salir de nuestra rutina.
Si quieres conocer formas de salir de tu zona de confort puedes leer mi artículo “ATRÉVETE A SOÑAR“.
No tengas miedo al fracaso: Cambia la palabra fracaso por aprendizaje, y cambiará toda tu perspectiva. No son fracasos las cosas que hemos hecho mal. Son aprendizajes. Lo que hemos de hacer es aprender de los errores y así seremos mejores.
Deja de buscar aprobación: nos hemos acostumbrado a la aprobación de los demás y a veces nos importa demasiado su opinión, incluso de personas que casi no nos conocen. Hemos de ser conscientes de que no podemos gustar a todo el mundo, que hagamos lo que hagamos siempre habrá alguien a quien no le guste. Hemos de tomar nuestras propias decisiones, y darnos cuenta de que somos diferentes. Cuanta menos aprobación pidamos, menos necesitaremos y nuestra autoestima crecerá.
Sé más asertivo: aprende a decir no cuando tus necesidades y tus límites estén en juego. Dí lo que piensas y opinas aunque no estés de acuerdo con los demás, pero respetando su opinión y sin juzgarla. Escucha cuando te hablan, pero escucha de verdad, no pensando en tu respuesta, e intenta empatizar, ponerte en el lugar del otro. Esto te hará conectar con las personas, se sentirán a gusto contigo, te valorarán e influirá positivamente en tu autoestima.
Si quieres trabajar tu asertividad puedes leer mi artículo “Cómo ser más asertivo sin perdernos a nosotros mismos“.
Modifica tu lenguaje corporal: Las personas con alta autoestima caminan con la espalda recta, los hombros hacia atrás y miran a los ojos. Proyectan confianza en sí mismas.
Intenta asumir esa postura aunque no lo sientas. Te sorprenderá el resultado. Al cabo de un rato tu cerebro creerá que esa postura es real, y aunque parezca mentira tú te sentirás más confiado, y tu autoestima mejorará.
Cambia tus creencias limitantes por creencias positivas: descubre alguna de tus creencias limitantes y cámbiala.
Encontrarás algunas de nuestras creencias más comunes en mi artículo “Nuestras creencias limitantes nos impiden avanzar“.
Gánate el respeto de los demás: si cumple tus promesas, eres humilde y agradecido, si asumes la responsabilidad de tus actos, y te mantienes firme en tus ideas la gente te respetará. Y el respeto de los demás y el tuyo propio aumentan tu autoestima.
Acéptate y perdónate: Si no te aceptas como eres, querrás ocultar tu verdadera forma de ser, comportándote como no eres, sino como crees que los demás quieren que seas. Esto baja tu autoestima terriblemente y te hace daño. Acepta que no puedes gustar a todo el mundo y que eres como eres. Esto no significa que no puedas intentar cambiar o mejorar aquello que no te gusta. Para eso está el autoconocimiento, y la mejora continua, pero siempre desde el respeto y el cariño hacia nosotros mismos. Aceptando nuestros fallos como aceptamos los de las personas a las que apreciamos.
Estas son algunas de las cosas que puedes hacer para aumentar tu autoestima. Practica algunas de ellas hasta convertirlas en hábito. Haz consciente lo inconsciente y pronto verás los resultados.
Y recuerda nuestro lema:
“toma el control de tu vida, vive la vida, lucha por tu felicidad”.
Hasta la semana que viene. Un beso